viernes, 25 de diciembre de 2009

Chico unicornio - Boy Scouts


Mi causita el Chico unicornio ha sacado su disco. Lo estoy vendiendo a 15 lukas en la librería La Tertulia del CC de La Católica donde trabajo. Entonces solo diré que está bien hecho, que me gusta y que será leyenda.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Kuleka's choice

Un día fuimos a una fiesta. Hicimos el ron, habían flacas con ganas de sexo. Pero estaba con mi novia, buscando los rincones lejos de los cuerpos que se mueven “bailando, fumando, tomando, hablando estupideces” y estaba el baño y la cola para entrar al baño, pero como nosotros éramos los únicos dos con apariencia de uno, entramos juntos qué más da, pero nos dijeron que lo hagamos quickly, así que se la di, gritó un poco, luego nos lavamos. Encontramos una cajetilla de cigarros en la ducha y nos la llevamos. Salimos con los anteojos oscuros y el cigarro, cada uno, con cara de aquí no ha pasado nada mientras todos se reían y adrenalina, yo también quiero hacer eso, ¿quién me acompaña? Y miradas sin rebote. Flacas rosquetas de mierda. Yo un poco aburrido, era su fiesta y no conocía a nadie, lo cual me motivó a hacer un poco de escándalo, los viejos gritos y jolgorio después de cada perorata del dueño de casa, un tío de treintaicuarenta años profesor de todos los mocosos que se habían juntado en su depa a celebrar el fin de ciclo del curso de fotografía con música de estudio 92: una mierda. Patear algunas sillas y meternos a empellones tras puertas cerradas, hablar con chiquillas ardidas de 19 de sexo, que es en lo único que piensan y yo también. Y mi flaca con el viejo: ya no tomes más, cállate, vete, ya me voy, ay te odio, ¿por qué te comportas de esa forma? Madura, pareces un niño, ay. Y yo, pero estoy ebrio, estoy en mi deber de hacer todas estas cosas con toda esta gente que me llega al pincho, por aburridos astalkulo. Si no hay violencia, ni pogo ni gente orinando en la paredes y vomintando en la escalera, no hay fiesta, me largo.
–No pues, son mis amigos, tienes que comportarte.
Le agarro las tetas.
–No, suéltame. Me lleva de la mano a otro sitio a medio construir sin luces, sin ventanas, solo unos enormes huecos cuadrados al vacío. Me emociono, me gusta ensuciarme mientras tiramos. La voy a desnudar. No se deja.
–¿Qué te pasa ah? ¿Qué tienes? –Su carita de agobio está alumbrada por la luna.
–Vámonos de aquí amorcito, ya fue, ya estamos bien ebrios. Ganas de caminar por el vano de la ventana sin cristal y ella, bájate pues, te vas a caer, no quiero que te caigas.
–Te amo cariñito, ¿ya vamos? –mi sonrisa pánica la convence. Entraremos nos despediremos de todos y nos vamos al hotel.
–Media hora más.
–¿Qué, media hora más? Todo el ron va a subir a mi cerebro y entonces no me responsabilizaré de lo que haga y tus amigos me echarán. Entonces hago las cosas que tengo que hacer para que ella me saque de ahí, mientras el resto dice cosas y se ríe y el dueño de la casa se lleva una mano a la frente.
Pero hacer roche, es parte de nuestra cultura y yo soy antes que todo una persona culta.

Chairlift - "Evident Utensil" Music Video from Data Mosher on Vimeo.

lunes, 7 de diciembre de 2009

En algún lugar del mundo ese día recién está amaneciendo

Cada minuto es un nuevo día para comenzar a reír sin motivo,
¿no es fantástico? El sol sale por el este, luego se disuelve en el mar habiendo soltado su armonioso ritmo. Incluso el planeta más helado bailó en el fondo del salón, donde nadie lo estaba mirando y aún así la burocracia no descansa en Trántor. La vida en el sol sigue ardiendo de amor, los requisitos para viajar al centro del sistema son claros. La repetición es inevitable, la alteración absolutamente imposible. El ganador ha ganado la partida solitaria desde antes de jugarla, los aliados en su nombre siguen celebrando el triunfo. Las sombras de la derrota son islas hundiéndose en un tiempo que se niega a quebrarse y a aceptar su inexistencia, ¿no es fantástico? Es maravilloso, nada puede detener su verde expansión. Ciudades digeridas, mentes absorbidas, cuerpos reutilizados, repotenciados con prótesis. Principios que no acaban, caminatas, peregrinaciones al más allá, pestañeos, largas inhalaciones y exhalaciones con la cadencia de las olas, diseños y patrones, obediencia, filtros, radiador de nave nodriza, freezing thoughts about dead, un imperio del sol, Vaca Multicolor. Realese is peace. Así habían sido las cosas desde siempre, adivinarlo debió ser fácil, pero mantenerse en la fe de ello, qui?en lo hubiese dicho. NeoKozV dice que esto es también una pérdida de tiempo. Le digo que tiene razón, pero acaso alguna vez fue posible ganarlo-aprovecharlo y en qué, por qué y para qué? y además, qué tan blandos le han puesto los músculos la razón y qué cosas bellas ha hecho la razón en todo el largo tiempo? por sus frutos os adictaréis. Este tiempo invertido también ha sido hecho para ser lanzado a un viaje sin retorno, como cada alma y cada verbo hecho carne. Y sin embargo ya está aquí una vez más como el hijo pródigio, para salvarme del tedio con su cuento. Su mujer ya no lo quiere volver a ver. "Mírate, estás todo desprogramado", le dijo desde la ventana, esta vez ya no le tiró la llave. Tuvo que mirar el amanecer, como siempre lo había deseado: con frío y sin esperanzas, para darse cuenta que la realidad humana es un rompecabezas, entretenimiento de serpientes y que los hombres-serpiente hacen jazz entre nosotros, como el sol y como Trántor, es decir Roma, es decir lo que hay dentro de las murallas, los campos AT.
Cuando hablo de luz, no hablo de otra cosa que no sea de velocidad, tampoco como un Paul Virilio que la considera velocidad en la carrera armamentista. Mil veces no me refiero a la velocidad para crear un método para eliminar a los separados-de-mí-por-la-misma-frontera, ni siquiera velocidad para per-durar ni man-tener, sino para improvisar y permutar las invariables variaciones. Veo mi piyama, parece decir: "Tengo sueño, pero no quiero dormir, hay tanto por hacer y todavía ni siquiera he comenzado", un duchazo unheimlich donde pueda entrar el mundo entero con fría agua tibia hirviendo, huevos sancochados, puré de palta, café con leche, atún y cebolla con limón, pasta de dientes morada de jora. Estrábico, estrábico, desafuero sin sujeto que lo sienta entre los semáforos, marcha de las emociones puras sin nadie ya que las quiera experimentar, como bibliotecas que nadie visita ni siquiera por curiosidad, la más importante de todas las preocupaciones que han venido matando a los gatos.
-¿Total, de qué va, ah?
-No sé, mira mira ya va a amanecer.

domingo, 29 de noviembre de 2009

martes, 17 de noviembre de 2009

"Critiquen, opinen, insulten perras!" dijo PKD desde la profundidad de su mente anulada



Estoy más feliz que cuando le viene la regla a tu flaca.
Su carita de placer en la mesa del bar antes de cerrar viendo que nadie nos esté viendo.

Una palpitación, un sonido de ventanas agitadas por el viento o el silbido triste de un ventarrón entre dos hojas de vidrio o a través de una ranura rota una tarde gris. Qué el internet y los diez mil millones de cerebros se vayan a la mierda a cosechar habas, a pasear en el bosque, a chatear por el msn. Fumo un pucho, la chica que conocí el lunes me dice que hace daño. El escozor de la picadura de una pulga un martes, un marcador encontrado entre las páginas de las ficciones de Borges, se pueden ir de vuelta a casa y dejarme solo, pero tráiganme a mi chica sin ropa que le quiero embutir toda mi enciclopedia por el culo hasta hacerla llorar y darle y lamerle el clítoris y seguirla remojando toda dura adentro de ella hasta que me vuelva a decir que pensó que casi se moría de un paro cardiaco y dormir, morir sin siquiera pensar en todas las horribles y angelicales cosas que le haré mañana cuando vuelva a nacer abrazado a su cintura. Sigue lloviendo, bueno garuando qué más da. Es Lima.

Dice Ciorán desprevenido que el amor a una mujer es incompatible con el amor a Dios, que ellas, sus rojas compuertas ascensionales son entradas a la cima del cielo, a un lugar más allá de la perfección. La multiplicación de infinitos podría haber sido inevitable en los tiempos anteriores a la aséptica profilaxis moderna y con ello la progresión aritmética del sufrimiento, ja, de vivir. El sexo hoy es una gorda que les pregunta a sus panelistas cuánto disfrutan del sexo anal, que dice pareja en lugar de Montaner, como caritativos explosivos sobre celestes atolones y televidentes drogados dejando pasar las horas en estado de semiconciencia zombie hasta el café y saludar al jefe una mañana cualquiera. No hay nada más bonito que una mañana de domingo sin importar qué mierda te hayas podido meter la noche del sábado, pero eso es un leit motif del rock.

Soy un anciano y tengo derecho a sentarme en la banca que me dé la gana y a comer helado no importa de qué sabor y a declamarle honrosas poesías al viento inspirado por las piernas de cuanta señorita pueda ver e imaginar entre las sombras en las que estoy sumido. Soy libre, antojadizo y punk porque desde siempre he estado más cerca a la muerta que cualquiera de ustedes, mi caminar cansado y descalzo, a pesar de enmudecer los caminos bizantinos que me condujeron hasta aquí, de lo único que hablan es del olvido, del soberbio olvido de todo, esa enorme espalda que se va, del Dios en el que me he enterrado vivo y de ti.



Si Ciorán hubiese leído los cómics de la Marvel o aunque solo fuesen los orígenes y la saga de Galactus, el devorador de mundos en una media hora de éxtasis, todos queremos tener una experiencia real, intensa que ponga en jaque al resto de seres sintientes y pensantes para que den una chekada asesina de al menos dos minutos y la voz que no sabes de donde viene y se reproduce en tu garganta rebote en todos ellos como una pelotita de pingpong que se multiplica de colores distintos con cada bote alegre que da mientras sigues caminando o corriendo como Lola o surfeando como el deslizador plateado o manejando como Meteoro o caminando como Jhonny Walker, pero en un movimiento que nada puede detener y sigues en la lucha por encontrar ese sentimiento intenso que te lleve al borde de la muerte, pendiendo del hilo al filo de esa navaja aburrida, pero enfrentar la realidad de cada instante es abrumador pues todo lo aburrido es igual de intenso que ese encontrón con la virtual realidad de realidades que se niegan y se abrazan en paradójica y absurda confusión efusiva, como una fiesta de sensaciones en las que alegrías, penas y tedios, angustias y euforias bailan unos con otras y crean mestizajes enfermos y nauseabundos que uno, sí ese uno que es uno pero es nadie en realidad porque es la generalización de todos esos unos que individualmente son asquerosamente tan raros y únicos que nada se puede decir de ellos, uno termina vomitando de placer frente a tal abigarramiento de información inexpresable. Claro, dan ganas de sentarme frente a un teclado y comenzar a redactar un informe para la interzona, pero ya ni siquiera queda tiempo para esa mierda. Media hora de éxtasis, aunque sea media hora, avizorando a Dios o al Aleph que sea, proyectando las historias de los antiguos universos, entre otras cosas maravillosas realmente sí, muy maravillosas visiones, una lanza clavada en el desierto y banquetes en el cielo que se repiten cada millón de años, pensamientos y sentimientos multimedia (ni hablar de la cocina de mi país, el paraíso de todo sensualista poeta sinestésico iqueño) a los que todo advenedizo y tontuelo chiquillo contemporáneo tiene acceso. Oh Dios, ¿dónde estoy? Ayer el tiempo solo me alcanzó para desayunar y ya era otra vez de noche y no recuerdo cuándo fue la última vez que estuve dormido, pero nuevamente tengo hambre y por favor que haya algo que comer en el refrigerador y también que exista un mundo con árboles o yo qué sé científicos que saquen oxígeno de sus máquinas y las cosas que necesito para seguir existiendo, y que en la tienda sigan vendiendo puchos, que quiero seguir viviendo a mi estilo que si no para qué.

Las ganas de humillarse por desprecio a los demás, de hacer el papel de víctima o de monstruo o de bruto… perdido en el fondo del mar entre tiburones y cachalotes. Luego el nacimiento del sol hace que aparezcan guías, mojones alados, bellos ancestros, dodos extintos titilando en una ventana de LCD, una voz de madre que nos habla del futuro en medio de semáforos de aeropuertos intrauterinos: detente-avanza, un Dios refulgente y despiadado frente al cual se arrodillan millones de árabes muertos por la tarde, como a la espada del espejo o a una estatua búdica del ser tirado ahí sin hacer nada, nada hacer, haciendo chino, chinazo, nada ni gobernar ni nada ni sufrir ¿está viviendo? Es acaso Buda un Dios con autoridad para decirme cuál es mi destino o qué debo hacer en este océano de tiempos, de esferas, de sangres, de árboles tradicionales y serpientes plumíferas sedientas y flamígeras, colores y drogas, música y nuevamente perdido en las últimas décadas del siglo veinte, donde cada canción pop es un grano de arena anhelando ser subida a la red así como las piedras del fondo desean que se seque el mar para finalmente sentir la superficie, tomar contacto con el oxígeno y comenzar a oxidarse como cabellera roja ardiendo en una calle, llamando la atención del ser humano liberado de opresión, pero no de su propio hambre.

No soy talentoso, soy talentado porque no nací con talento, lo obtuve de la calentura, de las ganas de tirarme a mi flaca cada día, de despertar y cada noche, esperando al sueño tardón, oírla gemir en cada rato libre que tengo. Soy un talentado y sigue el tren…

Siempre había saludado con un “buenas” a los padres de mis amigos cuando voy a sus casas. Siempre lo había hecho hasta que conocí a la Kwin, es decir a la mamá de Javicho. La misma que una vez botó a todos los garbage de su casa con un revolver en la mano por encontrarlos, casi una decena de adolescentes apestosos, haciendo una malakatonche en su sala, sofá patas arriba, sillas tirada en el suelo, la mesa arrimada a la pared y cuidado mierda, que van a romper el televisor.
–Señora, buenas.
–¿Buenas qué? ¿Buenas noches, buenas tardes, buenas días, qué?

Si me equivoco corrígeme o al menos hazme ver mi error, Señor. Señálame con tu dedo y hazme sentir amado. Di mi nombre Señor y envíame a donde tú quieras e iré en silencio y complacido.

Stan Lee, Jack Kirby, Alan Moore, Warren Ellis, mis caricaturistas favoritos se nutrieron de olvidadas mitologías, fracasadas hipótesis científicas y truncos proyectos político-militares para construir sus maravillosas narraciones, sin embargo el aliento con que las tejieron, que viajó por el gusano espiritual de su propia conciencia, el fractal sencillo que surge cuando un espejo es colocado frente a otro, cuando la máscara ya solo llora o ríe en el suelo hecha pedazos; es la cosa inmutable que perdura, una tradición que atraviesa todas las esferas, nace, gatea, camina, corre, vuela y muere con cada conquistador, cada navegante y ser perdido en continentes ajenos, donde no les toca ni tienen voz ni nadie que los entienda. Los exploradores en los límites de la incomprensión, el ángel salvaje que cayó una mañana, el asesino drogado violado en la cárcel, la mónada encarnada en una familia en la sociedad humana o en cualquier otra esfera en estado de descomposición. El amor perdura, es lo único que mantiene con vida a las esferas. El amor, así sea un cómic que te hable de amor, volverá y volverá y volverá hasta salvarnos a todos, amor como darlo todo por lo que amas, sentirte protegido por aquello que amas. La esfera resplandece de amor como el sol, la esfera que soy con mi amigo imaginario, la esfera que somos con mamá y papá, la esfera que soy con mi flaca, la esfera que somos en un salón de clases, la esfera que somos todos los que leemos comix y jugamos calabozos y dragones, la esfera social, la esfera del estúpido partido político de mierda que no sirve para nada y no debería existir, la esfera nacional desarmada, la esfera global en un tonazo sin final, máquinas sembrando y cosechando mientras los humanos se divierten en las azoteas de Manhattan, la esfera heterocósmica, full of love.

La hora de la dulce y cruel verdad, el momento alfa y omega en que somos observados, juzgados y condenados por los eternos a través de sus pantallas de la misma forma como desde la protohistoria la gente se sienta en su casa en la tranquilidad de los domingos a mirar televisión y tener poderosas, mágicas visiones de lo desconocido y sus mil nombres un poco como hacía Lovecraft cuando niño a través de sus cientos de canales, pero que es inconscientemente deseado a través de todas las dimensiones de la existencia: la gran hora del mambo, mamboleo placentero y las multieyaculaciones orgásmicas jadeantes ardiendo como cueros curtidos arrojados al fuego.

Power Rangers de la India deteniendo la legendaria batalla entre kurus y pandavas patrocinados por Nike.

Me he acostumbrado a no sentir, a no pensar. Sólo a dejarme llevar por los llamados del viento, sus arrolladores aullidos, almibarados arrullos a la vera de sus refrescantes arroyos, donde suicido al licántropo y me esfumo en el vaho abandonado por tu cuerpo tibio, oportuno.



Humo inocente, genio cautivo, mareas azules, aspirinas flotantes, urban style, rapero elegante. Hoy leerás a uno de esos poetas nuevos que nadie lee, porque todavía nadie ha dicho nada bueno de ellos, bueno porque nadie ha dicho nada de ellos y serás el primero en decir si te gustó su musicalidad, la elocuencia de sus ideas, la magnitud de su voluntad manifiesta o la inefable serendipia provocada por sus perversos deseos latentes. Al despertar, cuando frente a tus ojos ya no tengas estos párpados pesados sino esa cualquier otra cosa de siempre, te habrás olvidado todo esto. Ve y busca a tu poeta nuevo.

Oe, vete pes oe milf y llévate a tu dilf para que pueda seguir leyendo que están haciendo que se me pare. Libertad, ¿sí, pero para qué?

El día que se conocieron, PKD acababa de ejecutar una vendeta, que había planeado en un largo año de estreñimiento. Con la maestría genial que solo la inexperiencia le podía dar.

A veces la lectura de Joyce resulta tan incómoda que la tengo que alternar con algo de Monterroso, para saber que la vanguardia se estuvo yendo desde siempre por otro camino. Que definir a estos hombres es simple: alguien haciendo algo distinto. En ello radica su masificada vulgarización. Cada horrible muriéndose como hoja de árbol en otoño.

Todo lo que espero de la vida es que se acabe lo más pronto posible y que me deje en paz.

Todo ya está programado, ya está escrito. Deja de escribir, ríndete.

De lo que debería encargarse el gobierno si en un mundo adecuado hubiese uno, es que sus ciudadanos, sus habitantes pudiesen crear e investigar según sus propios intereses, proporcionar los canales para que la inspiración fuese un flujo permanente sin ramajes entramados y asmáticos donde ésta se trabe en su viaje, iluminando universos maravillosos ahí donde todavía nadie ha visto y cada quien debería dedicarse por completo en un estado abastecido a ese fin: explorar el todavía virgen campo inconmensurable y desconocido del inconsciente y de todo lo que todavía no se ha pensado ni siquiera que se podía pensar y todas sus posibles permutaciones grinder.

This Old World - OLA PODRIDA from Zellner Bros. on Vimeo.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Plagiar es besar a tus ídolos

Como cuando sea grande seré Wayne Coyne, haré un cover de Cat Stevens y le pondré otra letra y otro taetulo.



Dejen en paz a los viejos borracherosos juliusianos que escriben wevadas, liberen a Chumpi!

Y para la gente que me pregunta: oi, cha es yo la tengo, ah?

Nada, son solo un par de gorditos y un cara de mongolo que hacen pavilian rock y los amo.

miércoles, 4 de noviembre de 2009



Cuando los esquizocínicos entraron al cuarto del hotel donde el PV fue visto por última vez paseando su enorme cabeza de noche esférica bajo el mar, encontraron entre el catre y el colchón un papel manchado de semen, atravesado por una aguja que todavía contenía gotas azules del secreto gel Blubber en la punta:

"Cómo volver a tener pulmones y escapar del Karakórum

Sale a las pistas a oler un poco de miedo mientras caga y deja una estela de mierda ardiendo a caucho detrás suyo. Si pudiese explotar y comerse nuevamente sus vísceras para luego vomitarlas y hacerlo como un Vaisnava creador interminable de universos aspirados y exhalados con su respiración angustiada y enferma, lo haría sin réplicas; casi como un empleado burocrático sin mesa ni silla donde sentarse que tiene que pedir prestada una computadora que daría lo que sea por reventar en la cabeza de su jefa después de arrancarle a mordiscos furiosos por lo menos un par de dientes frontales con un puntapié y un amable “buenas días”.

Cagar, dejar la mierda atrás y el viento, vivito y coleando hermano de la luna, arrancando los cabellos mientras cabalgan, gemidos al amanecer de la era atómica que solamente destruyeron Nagashima e Hirosaki un par de cientos de millones de ponjas hablando al mismo tiempo en mi cerebro que se dio cuenta que la sabiduría está debajo del guijarro que pateé el día que me echaron por primera vez de la chamba y quise comprar armas, unos cuantos cientos de miles de muertos y el desgarro, corte y sangre ayayay. Anestesiada insensibilidad total del brontosaurio no contento con su cuello tirado en el suelo de cuarto, la mochila y la cosa rota adentro tirados en cualquier parte como una bolsa de suero, de papas fritas de hotel y huesos. Puta madre, cortes en el grano y sangre en el espejo, pus corriendo como un río de maquillaje intravenoso. Espejo rotos en el suelo. Un par de ojo, multiplicados en fragmento. Me hice mil, luego nadie, luego uno y luego medio, cuarto, décimo, milanésima atómica en la nube rosa, que soy flotando entre el otros cuerpos en deriva que soy.



De bronce, ¿no? Está armada en su defensa, bastión impenetrable, pero blando y porosita. Dulce placer manjarioso de la lengua que la busca bífida, ardiente del deseo que lo mantiene aterido e insecto prehistórico a la vida, esa mierda nutricia, caldo de cultivo de locuras. Volcán erupción de. Abre los ojos, puta madre se me va el efecto (poco a poco vuelva la sensación de ser como Automatic Kafka), qué dure un poco más. Que venga y abra la puerta y me vuelva a decir sí quiere estar conmigo, que quiere pasar la noche acá, qué tengo frío en los pies y todo es tan simple, tan complicado. Es tonto sentirme así. No me quiere ver. Ya fue, hay mil esturnios globulares dónde distraer mi pirámide pútrida y babeante. La geometría, quiero comer cerebros y escupirlos. Nada puede detenerme en esta búsqueda de la belleza para aniquilarla. Dejar el mundo vacío, como ella me dejó a mí, agitando las estrellas haciéndolas sonar como un palo de lluvia, volando lejos y roja. Luz de moto de Tetsuo en Akira de Katsuhiro Otomo. Ella queda como estela, luz que no se apaga y deja la mancha, polvo de carbono asesino detrás del avión en que se fue su nave bella, blanda, rica. ¿Total, me vas a matar o no? Me llegas al pincho, no me vas a buscar, no me vas a sacar de acá, no me vas a llevar al cielo nor infernum, nor nothing? Amor, he estado leyendo comics y pensando en ti. En la tele todavía sigue la propaganda de Coggorno y la liberación de las masas pollas. Masas de pollas buscando las pollas y frotarse unas dentro de otras y luego la inseminación artificial y la impotencia sangrienta, ahora una de Kotex y la aguja que suelta el chorro azul de mierda que desearía tener una tarde clavada en el brazo y ver mi sangre convertirse en gel de blubber que un mocoso se eche en el pelo para seducir a una putita de mierda del montón. Soy inmortal, soy la última cagada en la evolución físico-matemática del espíritu humano y estoy viendo tele, déjenme en paz. Estoy cuadrado geométricamente en el punto de no retorno de un viaje pendejo a través de mi propia mente bailando demente en el salón de espejos locos con Burroughs hablando acerca del olor a calzoncillos rancios. Y ella dónde se estará dejando manosear y qué máquina estará utilizando para ello. Comprar un arma o sacarla de esas máquinas con luces y música 8bit con una de esas garras que tienes que dejar caer apretando un botón y moviendo una palanca enferma, pagar a una máquina asesina para que lo haga, convertirme en una máquina suicida para despertar en un planeta sanitario al lado de mamá palmera y papá elefante y una pipa inventada por Magritte que no sé qué cosa es.



Me gusta el pique que te metes para cruzar la pista. Estirarme como una serpiente que se muere por morder una pierna envuelta en sexuales harapos rotos, colmillos que se estiran venosos centímetros sedicientes, muertos de hambre y desesperación por esa carne inocente y fresca colgando del techo, goteando el jugo hemoplasmático, el hierro, el oxígeno rojo, tú sabes, esas cosas. Las comas, como me llegan al pincho. The same hunger, just changing its bare skin. Sedicientes, sedientos, locos estamos, amour fou.

Somos dualidad cósmica; su voluntad, el divino capricho de un ave de fuego que entra y sale de mi mundo cuando quiere como un salvavidas salvaje que no me saca de las profundidades del mar, pero que me alimenta cada cierto tiempo con oxígeno a besos, que desaparece dejándome solo para que vea lo horrible que soy y piense en los motivos por los que se fue, por los que se va aunque siga ahí, una y otra vez. No querrá salir herida, no querrá que la cautive, la atrape, la aprese; sino solo que la busque demente por el tiempo y el espacio en la enredadera verde que cuelga bajo las ventanas de las señoritas en espera de oscuras golondrinas y crestas colgadas como testículos rasurados de sus bocas babeantes y que sueñe despierto con sus plumas de colores de serpiente de río de selva de frondosidad, ricura. Mujer serpiente que inflama mi deseo y hace feliz de estar con vida para poder volver a encontrarla. Volver a verla es lo único que quiero hacer desde que me despierto y lo demás no lo recuerdo, acá venía la parte del Dr. Sleepless. Bueno es todo lo que hago por estar a su lado todo el tiempo, todo lo demás es mi personal Satan. Aunque me duela saber que sus alas partirán as angels should, que la gente se despide antes de desaparecer, es una mierda. Como la metástasis, luego la morfina, luego no más morfina que no quiero morir loca y no poderle decir “adiós, te voy a extrañar”, puta madre. Una felicidad interminable. Piso un buzón de esos que hay frente a cada casa y a veces agrupados en la vereda por donde paso para hacerlas sonar como matraca con la bicicleta y hacer que a la señora se le caiga la bolsa del pan o que a la empleada del hogar se le salga la sayonara. Un motor se enciende, todo está oscuro, me exalto lleno de paranoia.

Tenía fiebre,
volaba en llamas que escupían fuego cuando estaban vivas.



Y jamás sabré dónde se pierde ni qué maravillas prefiere antes que quedarse conmigo. Llega y canta una mañana para que el mañana pueda existir. Llega y canta mi nombre para darme cuenta que soy real y que lato y eso, amor, tú sabes. No importa cuánto me hayan querido convencer de lo contrario, canta mi nombre con sus mil voces polimorfas y deimoformes tan hermosas y aterradoras y yo por un instante me siento heroico, a punto de ser joven, sábado y ebrio en oruga de primavera, capaz de lo que sea porque sus ojos me han vuelto a recordar y pienso que así ha sido siempre y seguirá siendo toda la eternidad. La veo y no siento miedo, sino placer,

Los calaveras ya estamos muertos flotando en los océanos de incorpóreos y sus tentáculos, qué más da. Los grandes invisibles me la pueden chupar toda con su único ojo, ¿qué hicieron por mí? El aburrido mundo plano se volvió esférico, aparecí en sitios donde siempre hube estado, ¿y? El dinero, el hambre me tienen dominado; amor, no quisiera salir de la cama lo juro ni siquiera para bajar a la fiesta mucho menos para drogarme entre los ochocientos mil cuatrocientos rostros grises y en espera de trabajo, de mundo, de noticias y de salvación que me desgarran. Automatic Kafka es otra cosa, él solo quiere saber qué es ser humano, es como tú; yo quiero otra cosa, cualquier otra cosa. Everything is ok.

y si tuviese algún miedo ese sería el de estarme engañando y que ella algún día se fuese sin volver, si no lo ha hecho ya, incluso ahora mientras la veo con la lengua y penetro, pero ella ha vuelto y nos tomamos un té y no puedo dejar de querer morderle el pico y perderme entre sus plumas rojas como infinitas pulgas que la muerden para succionarle la leche y quedarme a sus pies mirando su vagina mojada mientras me masturbo y ella fuma un cigarro y hablamos de lo rápido que transcurren los domingos y todas las palabras de amor balbuceadas bajo el agua de la tina se hacen una, mil milanésimas de segundo multiplicadas por dos."

CRC le devuelve a su hermano la misma mirada de pozo de piedra negra en el desierto, “hemos llegado demasiado tarde”. Tendremos que llevarle este papel a KWD3. Él sabrá dónde podremos encontrar a PV y saber la verdad: quién le dictó este manual de instrucciones y desde dónde.

martes, 20 de octubre de 2009

Feliz Cumpleaños!!!



El pequeño vagabundo tenía una pecera llena de agua negra alrededor de la cabeza; bueno, como la que nubla los sentidos de la gente común y corriente todo el tiempo, al fin y al cabo; pero él no lo sabía. Adentro, además de su putrefacto cerebro drogado, nadaban los peces fosforescentes sin hacer nada, solo brillar en la oscuridad como resaltadores faber castell, abriendo y cerrando la boca como un montón de párpados inútiles. Esta escafandra de lunas polarizadas no le permitía ver nada más allá, entonces se golpeaba con todo lo que se atravesaba en su camino. Se chocaba con los árboles, los caracoles, las cometas que no volaban, las chicas con pantalonetas y perritos de menos de 30 centímentros que salían a correr a los parques en las mañanas, las cacofonías y los lentos autos que habitaban su planeta enfermo, lleno de personas desconectadas e invisibles. Nadie conocía el verdadero rostro del pequeño vagabundo, pero a nadie le importaba, así que ése no era el problema. Cuando esperaba su turno en el banco, los otros esperantes solo lo miraban un ratito y sus cerebros decían: “ah, es una cabeza negra con manchas de colores”, y al instante lo olvidaban, como todas las demás cosas olvidadas por otras nuevas y sorprendentes que suceden a cada rato, como seguramente quien lea esto lo olvidará pasado mañana o como aquel otro que, luego de leer el blog de Dios, lo olvidará y se ocupará de sus propios asuntos y oirá a sus propias voces y mirará sus propios peces fosforescentes.

Iba y venía a donde las voces le decían que fuera. Los peces, que eran lo único que podía ver, cambiaban de color y le decían cosas como: “oi, mira bien, oi sonso, que estamos hartos de los zamaqueos, los estunkeos, los crasheos y los rasheos que le metes a tu casco, oi sonso”; de la misma forma como los semáforos hablan con el espíritu de cada automóvil en medio del tránsito. El pequeño vagabundo era medianamente feliz en medio de esa confusión, porque a veces los peces estaban alegres y jugaban con su nariz o con sus ojos y le decían cosas como: qué bonita nariz, qué bonitos ojos, y el resto de engaños que suelen usar los enamorados para alcanzar el sexo de su presa. Y el pequeño vagabundo lo aceptaba pues al fin y al cabo eran peces y los peces son totalmente inofensivos y además así como a todo el mundo al pequeño vago le gustaba que los peces hablaran tan bien de su nariz y de sus ojos porque nunca los había visto. Pero eran suyos, como suyo era el dolor diario del roce con el mundo, y escuchar a alguien hablar tan bien de algo suyo le devolvía la voluntad de seguir viviendo. Al fin y al cabo era su vida, y, le gustara o no, tenía que vivirla día tras día en las mismas condiciones, esperando a que los peces lo edulcoren o lo regañen de acuerdo a las circunstancias y los caprichos piscianos. Cada vez que los habitantes de la pecera que envolvía su cabeza sufrían los continuos accidentes acaecidos, les pedía perdón a pesar que no sabía bien cómo no volverlo a hacer. El pequeño v. era una wevonazo, así que zamaq, stunk, crash y rash, todo el tiempo. Y dentro de la pecera manteniendo el ecosistema con vida como una bomba de oxígeno, su cerebro le decía al Pequeño Vagabundo, como un anciano lleno de sabiduría oriental con una delicada y armoniosa voz:

Oi
bestia inmunda de mierda,
puedes hacerle caso alguna vez
a alguien en tu puta vida.
¿No te están diciendo
que dejes de estar golpeando
esta cosa que llevas
alrededor de la cabeza?
que nos haces daño a
todos.

Y al decir “todos” su cerebro se miraba las descalzas puntas de los pies y se daba media vuelta lleno de senil incomprensión. El pequeño v. no podía comprender. ¿Cómo puedo ser normal y dejar que todo a mi alrededor funcione? si siempre lo estoy echando todo a perder, chocándome con las cosas y destruyéndolo todo a mi alrededor y dentro y fuera de mí. No lo entiendo. Ni siquiera sé dónde estoy ni para qué sirvo o qué hago aquí perdiendo el tiempo tan tontamente.

Entonces el pequeño vagabundo se tiraba al suelo y se ponía a llorar, a ver si algún día dejaba de ser el maldito y bastardo idiota que había sido desde que nació. Y sus lágrimas, además de asesinar algunos peces que no soportaban la sal marítima de sus ojos, clareaban un poco el agua, de modo que después de varias semanas de estar tirado en el mundo llorando, como un soldado norteamericano al que le han puesto una bolsa de yute en la cabeza para escuchar voces árabes que le hablan como máquinas vivientes a las cámaras de vídeo, despertó, abrió los ojos y vio por pedazos ese mundo que allá afuera rebozaba de vida y de cosas increíbles que nunca antes había visto como las nubes, las ballenas, los globos aerostáticos, los dientes de león, la tele y esas cosas de las que los peces fosforescentes nunca le habían hablado. Aunque por ese entonces el pequeño vagabundo no había logrado todavía leer a Borges porque le era técnicamente imposible leer esos incómodos libros de páginas que se escribían en ese tiempo y de los que nada sabía, conoció a través del lenguaje para sordomudos a Caperucito, un broder que le dijo: hey tío si quieres salir simplemente sales y ya. Y aunque el pequeño vagabundo no entendió bien lo que Caperucito quiso decirle con todo ese cuento de lo de la abuelita y el lobo, concluyó que ese chico que vestía una tela encima de la chimba debía ser, necesariamente, un buen tipo. Al menos alguien del mundo exterior ya le había hecho el habla, sentía que estaba progresando y que muy pronto ya nadie le increparía nada y podría ver el fútbol, ir al cine, hablar acerca del clima y qué sé yo, tantas cosas, en fin… ser una persona común corriente.

El pequeño vagabundo dejó de escuchar a los peces por un tiempo, en parte porque estaban muertos, pero principalmente porque los había olvidado por completo sin saber que éstos habían pasado a mejor vida debido a la salitrosidad de su llanto.

Como dije anteriormente, no murieron de la noche a la mañana. La conspiración suicida había sido un éxito. Pronto liberarían al pequeño vagabundo del terrible encierro cósmico que sufría, desde que las bestias satánicas le habían envuelto la cabeza con esa maquinaria de vidrio. Los peces aparecieron por generación espontánea, de la misma forma como crecen los ratones dentro de una bolsa sellada herméticamente llena de ropa sucia, pero ahora que estaban muertos y que había dejado de llorar, la oscuridad volvió crecer, como crece el verdor alrededor de un río, dentro del recipiente en el que estaban alojados el tequeño v y su cerebro.

A pesar que sus cuerpos habían dejado de brillar y se hundieron al fondo del acuario, causándole un escozor insoportable en el cuello, sus consejos quedaron guardados en el corazón del p. vagabund como estrellas de colores fosforescentes en medio de la acuosidad de sus percepciones. Ahora todos sus empeños estaban volcados en lograr salir de esa esfera que durante toda su vida lo había tenido ahí en medio del sofá, del hiriente vacío horizontal de su cama mirando al techo, rodeado del eco de voces cruzadas que todo el tiempo lo mortificaban con tareas pendientes y misiones cósmicas bajo el polvo del desierto, ecos de voces sin origen que definitivamente quería destruir y olvidar, apagar, dejar que se perdieran en un horizonte sin fin y ni un objeto donde rebotar. El eco debía terminar. Poco a poco fue sumergiéndose nuevamente en una total y abrumadora oscuridad, esta vez ya sin los peces que, aunque sin gracia, le daban un aire navideño a ese aterrador abismo que lo separaba de la realidad y los chispazos fosforescentes que todavía esparkleaban su corazón nostálgico cada vez que recordaba los buenos momentos con ellos ahí en su espectral danza submarina a escasos centímetros de su nariz, se fueron apagando uno a uno pues la rutina automática y el tedio uniformado lo habían deprimido, creo que como a todos, ¿no? Así que el p.V. estuvo ahí, viviendo un poco sin ninguna ilusión ni deseo ni ganas de nada.

En un principio pensé que si me olvidaba de ellas, las voces desaparecerían de la misma forma como desaparecieron los peces de colores brillantes. Pero por más que lo intento ellas vuelven a chillar: que pásame la sal, que ya es hora de que te levantes de esa cama y la tiendas de una vez por todas, que cuelgues el teléfono, que tienes que hacer algo trascendente con tu vida y para eso tienes que conectarte con tu espíritu a través de la oración o la meditación, que no estás hablando con nadie, que mires para los dos lados antes de cruzar la pista, que utilices por lo menos unas cincuenta mil palabras distintas para pensar antes de morirte, que no salgas a la calle con piyama, ahhhh las odio, no las soporto, todo el tiempo diciéndome qué debo y qué no debo hacer. Solo quisiera que esta oscuridad se convirtiera en silencio total para poder finalmente descansar de esto. Todo lo que siempre he necesitado aparece dentro de mi esfera y de esa forma sobrevivo y esto no se acaba nunca. Pero las voces, ¿cómo puedo callar a estas voces que no me dejan simplemente irme al infierno en línea recta?

Así que el peque vag quería mantener del otro lado de la línea a las voces, pero era imposible, porque éstas no se cansaban de estar cantando y berreando todo el día mandatos y descripciones absurdas y ruidosas acerca de lo sucedido con Mishima, Kawabata y George Reeves.

De pronto un día su cerebro le dijo: “Eh, mira loco, en realidad mmm, bueno esas voces son resonancias remezcladas de todas tus experiencias pasadas, que tengo que enviarte para que reacciones como es debido y cumplas con tu destino; así que bueno, no es tanto mi culpa como debes creer (esas voces no son mías, son tuyas), sino que así funciona la naturaleza. Y pucha cholito, sé que todo este tiempo no te he tratado como es debido pero ya estás grande y creo que te lo tenía que decir tarde o temprano. Los mitos dicen que llegará alguien a salvarte de ti mismo, loco, ten fe. Ya llegará”.

Sé que las voces quieren suicidarme y seguramente tarde o temprano lo logren. Pero mientras aquella ave roja brille a lo lejos, no puedo morir. Y no sé si es porque ella no me dejará hacerlo o yo no puedo darme el lujo de acabar con mi existencia tan prontamente e irme al infierno así, sin invitación ni nada, sin haber sido llamado, sin saber si soy o no el elegido por ella.

L’ave roja apareció una primavera. Desde ese día no pudo olvidarla. Era como una pluma entre sus manos o un rayo láser perforando sus retinas, un pez más grande que la pecera, con un pico silencioso, y no una trompa aburrida y resfriada, que hablaba de todo y al mismo tiempo no decía nada, que estaba cerca y a la vez lejos, tan dentro y fuera simultáneamente que no podía hacer otra cosa que contemplarla en el mismo silencio. “Si existe la magia en algún universo, es porque ella ha aparecido”, no dejaba de repetirse sin entender bien lo que quería decir esa frase compuesta subordinada. Todavía los domingos, después de almuerzo, la recuerda, como un simio que no puede olvidar el fuego o como un lobo ciego y viejo que no ha podido olvidar la luna para no dejar de aullar. Así que diseñó un plan para volver a verla.

La segunda vez que la vio fue gracias a su sorprendente astucia. La primera vez, nada, solo apareció ahí en silencio y él la vio en medio de la oscuridad sin saber si estaba dentro de las oscuras aguas amnióticas o allá afuera del castillo de cristal y del lenguaje bonito, en ese caótico e incomprensible mundo lleno de perritos y hot-dogs y buzones y edificios y cosas sin sentido. Pero así como un día ella apareció, ella volvió a irse. La misteriosa ave de fuego es así, se dijo. A veces está, otras no. Pero ¿podré hacer algo para que vuelva a aparecer? Y sin quererlo una voz se hizo suya. Una de las infinitas voces que hablaban acerca de noemas y amalabamientos, por una milésima de segundo dejó de hablar de cosas absurdas en ese tono monótono, aburrido y hostil que siempre quiso verlo muerto, para darle una idea, una ansiada respuesta monopalábrica: Llámala.

“Pero… cómo…”, se preguntó. Y mientras nuestro desesperado héroe se preguntaba cómo llamar a un pajarraco rojo que no sabemos exactamente cómo pudo ver un día de febrero en que le pedía consejo a su sabio y drogado cerebro para dejar de oír las voces que lo atormentaban; el reloj seguía marcando las mismas viejas doce horas una vez tras otra.

(Mañana la segunda parte y conclusión)

domingo, 4 de octubre de 2009

Solo para seguir encolerizábdro a mis anónimos lectrores

Aquí les va un nuevo poema que acabo de inventar con mis florilegios cautivantes:

Hoy nos despertó la llamada de tu vieja.
Cerraste la ventana y después te pusiste a cantar
1 2 ultramoquiento 1 2 ultrababieeeento woooo uuuu wooooo.
Me bañé y la habitación se lleno de vapor y te pajiaste.
Nos demoramos comprando los chicles y el agua.
No fuimos a la inauguración de Chota, ¿qué mal, no?
Queríamos unas chelas, pero no prendimos la tele.

Nada que aprender, nada que enseñar.
Los chicos creen que ya lo saben todo,
las chicas creen que ya lo hicieron todo y está bien.
Sólo queremos más dinero, cada día más.
Se cruzan, se quitan el sombrero
Buenas días!
Y dormir todo el día.

Soy tan especial y drogo y huevón. Suero y yema.
Como todos esos conchasusmadres. Queso paria colesterol.
En este mundo no sería feliz si no te tengoowooooo.
No sé qué voy a comer la próxima semana.
Me tomé mal las fotos tamaño pasaporte y en mi cuarto hay un paraguas que abro de vez en cuando. Tengo que devolver Mifune, Mr. Lonely y El árbol de la ciencia, pero ese antes lo tengo que terminar de leer y tb la máquina blanda que está en el baño desde antes que entrara a cagar todas las mañanas con la laptop, para leer comics.

Hoy hubo luna llena, ¿no fue ese el mejor poema de la noche, mi amor?

Soy más especial que Thom York y Michael Jackson juntos, porque soy el único genio que ha tenido a la divina providencia de su lado como para, en una vida como esta, vivir al lado de tan bella musa como es Kami, que me enseña el camino hacia las flores de los diez mil pétalos y los despertares más bonitos y ricos de la vida flotando en el polen.

Bueno, nos moriresmos por golosos de lujuria, mitad gatos, mitad serpientes entre pelos y hojas secas, despertares, pequeñas muertes, música sonando en todos los parlantes, botando el sonido del sol y los pájaros del amanecer. Lamida2 entre las lápidas. Ahora que estamos muertos ya no hay palabras para describir la terrible diversión. Son los cuatro jinetes conversando por celular y entrando a una página web, comentando en un blog. Eres nada.


No sé desde hace cuántos años no puedo dejar de cagarme de risa de absolutamente todo. No future, solo Kami. No soy especial, soy divino que es como especial pero suena mejor, como esas cajitas de tías que suenan como una pianola y tienen unas bailarinas dando vueltas sobre un espejo. Y tan rico que a veces me mordería para arrancarme un pedazo de carne también, pero felizmente para esas artes gastronómicas está mi novia, la simpar Kami, kami kami kami, Kamita.

Unj beso a tod@s, qué se diviertan!

martes, 29 de septiembre de 2009

Lamida1, escojo ser un gato

Al rededor roedor sin piernas
Teje el monje el hábito de perder
Desgrane el morado, luego sirva los platos
bajo el monte.
Quiera decir una palabra, pero diga otgra
agregándole o restándole una letra o dos.
Así como los Oulipo, cambie una palabra
y ponga el significado que de ella encuentre
en el libro en que por orden, comunmente alfabético, se contienen, explican y definen la mayor parte de las dicciones de una o más lenguas de un conjunto de los habitantes de un país regido por el mismo gobierno, o las de una ciencia, facukltad o materia determinada.
contra Materia mezcla materia.
Una rosita salida un ojal payaso con los ojos pintados de negro y sonrisa triste.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Baba, drogas, pussys!


El placer es una ecuación que no pienso resolver.


"Esas palmas, coño!"


Acabábamos de tocar en la jato de beto con el chico unicornio y sonó maldito. Luego comimos unos ricos tallarines verdes mientras escuchábamos a pichuleitor tocando the trooper en la sala, por el cumple de la quinceañera. Mmm, sí, ya habíamos cantado el happy birthday. Así que cuando ya no había más que hacer salimos al parque para unos pitzburx y jc contó lo del godzilla ponja que se cacha al godzilla gringo. "Wevón lo hace mierda en australia".


Por los bredas, así...


Va a haber chela.

sábado, 12 de septiembre de 2009

A todos los que perdieron la cabeza pero como el fénix volverán (imantados por ella)



Mira amor, estoy durmiendo a tu lado y por lo tanto todavía no he despertado ni me he dado cuenta que mi cabeza rodará por los suelos, ni que así has matado a todo nuestro pueblo errabundo. Tal vez una mariposa te esté soñando, como yo te sueño, perra. Yo, el idiota que cada noche sueña contigo, mientras su cabeza se pudre en un rincón y al que no le importará despertar solo para volver a ver tu mirada sedienta y el cuchillo selenita clavado en el cuello de alguien más.

Antes que vuelva a salir la luna llena tú y yo volveremos a ser nada. Como se lo dije hace diez noches para darle tranquilidad. Tú nunca creíste esta patraña, te daba igual.

Tal vez sea yo como tú y en mi sueño te busco para matarte. Tal vez eso es lo que hago con todo lo que amo. Mi amor para lo único que sirve es para que al fin, algún día, encuentre la ilusión perfecta y me suicide y luego yo la suicide a ella.

O tal vez sea que me miento y que en mi sueño mis serpientes solo llegan hasta eso: mi propia cabeza observando con sorpresa su propia desmembración (naves espaciales abandonando un planeta en destruxión) en una habitación con gente que conozco y otros que no, representando la misma escena nocturna a la luz arcaica de una vela, una y otra vez y en algún lugar, detrás del chamán o detrás de Judith o detrás de mi propia cabeza esté la salida a un mundo normal, tal y como lo conocía hasta antes de entrar en esta habitación donde muero mientras duermo y todavía no despierto inmortalizado en tan distintos cuadros, habitaciones, capítulos, libros sagrados, fotografías, memorias, blogs y otras interfases.

Y todos seremos salvados por tu chucha magnética, elevados nuevamente desde el profundo olvido hacia la luz a reconocer las viejas formas modeladas por tus labios en nuestros cuerpos que como letras dicen, replican, exclaman, arrojan a todos los que pueden ver tu santo nombre.

Así muere Holofernes, el decapitado, aún.

Fragmentos pasajeros, como los de Ivan Thays, pero sin tiempo para refinados ejercicios de la vanidad, fragmentos furiosos, cansados, hartos y sexuales, masturbación de simio en una calle tailandesa vista en el youtube. Agonía en mute, Ray Loriga viajando en una combi, explosivos mal fabricados, incendio en Mesa Redonda, una y otra vez. Chica cualquiera gimiendo en un hostal cabalgando a su asesino, al padre de sus hijos y su desvirgador. Niño durmiendo boca abajo en la vereda porque ya no pasa nadie a quien obligar a comprarle caramelos, serenazgos necios botando a los mendigos de las calles, trashumantes distritales buscando otro parque donde dormir. Adolescentes ebrios y arrechos juntándose para cualquier cosa menos para satisfacer sus naturales impulsos, enfermedad, pus en el espejo, depresión, amargura, rabia, nuevos problemas que resolver en la pizarra.

Esto no es un rinoceronte bañado en mierda, es mierda bañada en un Dalí rinoceróntico experto en fenixología y en cómo reaparecer después de muerto en pantallas-ojos-sistemas-nerviosos explotando una mañana tranquila, neuronas que se juntan y arden como pólvora. Moneda falsa, diez mil veces más existencialista que Carmen Ollé. Me la ponen al frente y le disparo en la cabeza después de violarla. Artistas calatos cachando furiosos. Vualá, arte, gimoteos, dormir, como cada noche, cada uno en una interfase distinta.

-Lo veo muy bien señor.
La última vez que vino a preguntar por un libro de teatro, agitaba su bastón y el resto de su cuerpo haciendo muecas horribles y desesperantes, despedazando torres de libros a su paso, gritando hasta que cayó al suelo y lo levantamos y se fue sin decir gracias ni nada entre ruidos mudos y extremidades trémulas, tentáculos de medusa fuera del mar, cuerpo de malagua evaporándose sobre una roca. Tristeza que probablemente solo comprendía su degenerado sistema nervioso. Hoy debe haber tomado las pastillas, casi parece un ser humano.

-¿Y, qué planteas?
*q planetas?

lunes, 7 de septiembre de 2009

prontOh, normal ah!

Le dije a Emilio: oe, cheka:

Emilio dijo: has visto "baila negro". Entonces yo dije: saúl.


Prontamente más aventuras tecnoastrocerebrales

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Norrin Rad's quest


Este poema estaba en mi bolsillo, así que cuando llegué a la casa de JC lo leí y le gustó.

Universos como mentes, con sus propias leyes y lógicas.
Uno donde un beso más la luna dé ciento veintitrés estrellas
y un sol negro.
Uno donde a la derecha el cielo sea azul, a la izquierda amarillo y a la derecha rojo,
cuando agitas la cabeza.
Universos poligámicos con diez días cada semana frente al mar.
Desiertos espaciales donde se celebren concilios mecánicos y orgías de salamandras en hogueras cuyas llamas en lo alto se buscan unas a otras para mezclarse, fusionarse en delirio, como las ramas de los árboles sobre la pista, a las que les cuelgan las raíces donde las aves hacen nidos y bulla angelical.
Trenes locos que van de uno y otro lado a toda velocidad llenos de pasajeros que como el oxígeno en la hemoglobina, respiran, respiran
agitados
dejando de fumar.

jueves, 27 de agosto de 2009

Ritual para que salga el sol



A las 10 y algo de la noche, estaremos tocando nuestros mejores éxitos en Mochileros. La entrada es 5 lukas, salir en un video de la Miguel's Band en plena efervescencia locuronesca no tiene precio.

Aunque de la nada, desde hace unos días el sol comenzó a salir.

viernes, 7 de agosto de 2009

Presentación de El cuy valiente


Es una obra teatral, con títeres y sombras, para toda la familia que por lo que me cuentan está muy divertida y va todos los fines de semana de agosto y setiembre en el teatro de la municipalidad de san isidro.
Apoyen el talento nacional pe varones!

miércoles, 5 de agosto de 2009

En mis bolsillos

De un tiempo a esta parte, encuentro en mis bolsillos papeles con interesantes anotaciones realizadas durante el día en la librería. Estas son algunas:

Historia del comprador:
Un día un comprador quiso algo especial y se sentó en el suelo a esperar la llegada de tan ansiado producto. Cuando apareció pidió una oferta. Pero las novedades no estaban en oferta. Así que siguió sentado un rato más. Se quitó los zapatos. La espera sería larga.



Cuántas gentes corren tras la riqueza sin tomar reposo.
Toda la noche hacen sus cuentas, por el día galopan.
La vida pasan en un anhelo constante, lleno de fatigas.
No saben que sobre el techo de sus casas el cielo es azul.
Tai Fu Ku
S. XIII

El hombre melancólico se encuentra profundamente enraizado en sí mismo, en más íntima relación con la vida que el hombre ordinario; siente más intensa y delicadamente; sus goces son más encendidos y más dolorosos sus sufrimientos.
Prólogo del Archipiélago de Holderlin

"Cuando haya conseguido inspirar asco y horror universales habré conquistado la libertad."

"¡Acabo de ver la imagen del viejo hombre de letras que ha sobrevivido a la generación para la que fue su brillante gracioso; del viejo poeta sin amigos, sin familia, sin hijos, degradado por su miseria y por la ingratitud pública, en cuya barraca ya no quiere entrar la gente olvidadiza!"

Baudelaire

Y acá está el nuevo disco que hice la semana pasada, que se llama "Mira y aprende". Espero les guste.

sábado, 18 de julio de 2009

Me kamisamié un poco más de 28 horas del día

Este es el orden en que vi algunos de tus videos favoritos, kami:

Primero me puse a pensar en lo imposible que es mentirte:


Luego me puse a pensar en lo que me dijiste sobre las ganas de salir a chupar:


Luego me di cuenta de lo anarkowanker que es este video y dije: ala mieeeerdaaaa!!!!


Después me quedé horriblemente pegado viendo este video más indio!!!

Tenías razón kamisama, octopus project es maldito.
Pero no vale, eres kamisama!!!

Y finalmente me quedé pensando en las ganas que tiene todo el mundo de ya no salir e ir a todas partes con piyama.


Y sí, hice clikatat este video


Te amo por kamisamearme, entre muchas otras más cosas.

lunes, 13 de julio de 2009

Porque la verdadera historia es la historia del Perú...

Me llena de orgullo saber que el punk nació en este país donde la historia fue robada, la memoria blanqueada, los gritones asesinados, todos intentan ser algo que no son y los punkers astalkulo se mueren ahogados en su rabia.











Perú garashero!

domingo, 28 de junio de 2009

One day - Michel Gondry

Le estaba contando a Reina que la vez pasada estaba yendo a mi jato después de un agotador día de trabajo, cuando en medio la Av. Aviación veo un estuche de cd's todo roto, con un cd afuera como la lengua de un perro aplastado en la carretera. Lo recogí con cariño y encontré otro como un cerebro dentro del estuche craneal. Vi la portada y eran los trabajos de Michel Gondry y yo dije: oooohhhhhhh, gracias kami por hacer que me pasen estas cosas!!!



De paso aprovecharé para hablar acerca de los dictators. Bueno, los dicktators son una caca.

viernes, 26 de junio de 2009

Muestra audiovisual del Jab Lemur


"El trabajo consta de tres modulos con piezas que he venido desarrollando en las ultimas fechas y que son fruto de la interaccion tenida en distintas cabinas publicas de internet de Lima como una forma de composicion en cirunstancias populares/precarias y de cuyo experimento resulta una obra constructiva/destructiva bastante interesante. La cita es el miércoles 1ro de Julio a las 7pm en las instalaciones del CFT Av. Arequipa 1155, se realizará el vino de honor... y un pequeño concierto.

Recycled es una serie de tres obras de audio y video experimental que he venido desarrollando entre los años 2008 y 2009 tras extender una búsqueda personal desde el formato disco-álbum hacia una propuesta audiovisual más completa, no solo en términos de presentación y decorado sino también en la ejecución de la obra. Recycled consta pues de tres niveles con una duración de 16 minutos cada uno y en conjunto cada nivel, pieza, sonido e imagen es representativa para enmarcar la idea de los ciclos, en este caso de los procesos autodestructivos a los que se somete un sujeto en estados de depresión severa, rehabilitación, ensayo, error y error de nuevo. La pregunta es ¿Cómo crear a partir de los procesos autodestructivos?"

Para más información sobre las artes lemurianas:
www.myspace.com/jablem
www.trozosdecaca.blogspot.com
www.myspace.com/trucorecords
www.trucorecords.blogspot.com
www.trucorecblog.blogspot.com


Jab Lemur - The motionpicture part 1

jueves, 25 de junio de 2009

Flashmob Perú

El chino Nakasone me pasó el link del último flashmob que llevaron a cabo en plaza San Miguel. Acá se pueden agregar para tener noticia de futuros encuentros de los adictos a lo sport.


Y también me pasó el corto onironáutico que hizo, con la música de Evamuss.

miércoles, 24 de junio de 2009

puede todo

Cuando vuelas como un barco que bota fuego por la boca
Sobre todos esos ojos cerrados
Y despejas los cielos a los soñadores
Para que puedan aterrizar como se hacía antiguamente
Sin torre de control ni walkie talkies
Y reluces la espada para entrenarte con la luna
Y los hijos del sol se sientan en primera fila para verte sangrar
Y Swedenborg te escucha dentro de su esfera dieciochesca
Y Baudelaire te escupe resentido mientras Rimbaud te busca tan indeciblemente desesperado y Chateaubriand te sonríe con el pitillo de opio entre los labios.

Y quieres ver los ojos abiertos por miríadas y necesitas un nuevo planeta virgen donde aterrizar.
Entonces desnudo entras al mar bajo la estrella rosa y resplandeces pudorosamente entre los peces.
Mil submundos heavy metal, mil deseos hardcore observas casi ahogado en lo más profundo del porvenir celestial y quisieras meterte en un refrigerador y congelarte en cero absoluto para detener esto aunque solo fuese un segundo, pero no.
Las invisibles líneas del telégrafo siguen enviando sus señales y ahora ves con calma cómo tu cerebro puede interpretarlas todas como si al ver los infinitos canales estuvieses comunicándote con una extraña deidad que siempre estuvo ahí, en el fondo del espejo cada vez que te asomabas a peinarte en las aguas calmas.
El aburrido espejo de todas las mañanas se convierte en un pez y cada una de sus escamas te comienza a hablar como lo hacía Escher, misteriosamente, maravillosamente, increíble.

Hoy aprenderemos a teletransportarnos.


Este broder me agregó al youtube.


Estaba en la casa de JC viendo este video el domingo, bueno el lunes, aunque la parte del ascensor ya la había visto, es más creo que ya la había colgado acá antes.

lunes, 22 de junio de 2009

Arabia 2

Quería escribir el título de algo a ver si así me inspiraba. Una ventana abierta o casi abierta, en realidad no sé, en una pared un poco despintada de una habitación en penumbra. Deben ser las cinco de la tarde o algo así. Todo es tan incierto. No puedo determinar absolutamente nada. He perdido el control, creo que ya lo había dicho. Quisiera recordar algo o alguien, pero no puedo y en el fondo creo que no quiero. Me causaría pavor y presiento que de hecho en algún momento un recuerdo me asaltará desde donde ya me acecha oculto, con sus colmillitos y su lanza, presto a clavármela en el cuello y cabalgar mi cabeza un par de cuadras.

Esta vez no habrá diálogos ni sensaciones japonesas ni ganas de drogas ni nada alienante. No hay angustia ni ansiedad ni adicción. No sé si estoy vivo o muerto ni por qué obedezco las reglas de tránsito y gramaticales. Del otro lado de la ventana todos rondan tan cuerdos y no los entiendo. Se asombrarían al verme. Bajaré por la escalera a ver qué hay. El torreón desciende interminablemente a una fosa rodeada de peldaños helicoidales incrustados en la pared cónica, el vacío es solo un punto negro color fuego al fondo y antorchas infinitas, encima de mí hay una nube de vampiros fosforescentes de todos los colores, algunos durmiendo y otros volando silenciosos, a veces el batir de sus alas y el choque de unas con otras suena tristemente a aplausos de un gracioso en el teatro al que nadie acompañó en la celebración del final de una mala función. Y mis pasos suenan como los de todos esos que después regresan a sus casas igual de tristes y desilusionados que siempre, con abrigos largos y grises que luego se convierten en sábanas frías y lunes.

Las escaleras no se acaban y no creo que nada bueno suceda. Atravieso la pared, me paro en una nube y bajo a ver qué de nuevo hay en la noche, desciendo sobre rayos y me entierro unos metros, respiro como árbol y el sol me llena de una vida rara, en la que cualquier cosa puede pasar. Me saludan los planetas que bailan desde siempre con regularidad y armonía en el cosmos que alguien más debe estar imaginando en algún sitio tirado sobre el pasto o la arena o flotando boca arriba o boca abajo en una piscina con poco cloro.

-Todos nos comunicamos, a veces nos dejamos en paz.
-Dijiste que no habrían diálogos.
-¿Quién dijo que esto era un diálogo?

El hielo flota y vende la idea de frescura en algún lugar vacacional. La sombrilla amarilla y el culo redondo de mujer. Sexo y penes flácidos de una humanidad que ya no tiene a nadie a quien clavar. Imágenes manidas e ídolos gastados frente a los que ya nadie se quiere arrodillar están guardados en las despensas de las bibliotecas.

La muerte viene por mí, oh sí. Esa vieja que nunca pasará de moda, esa a la que deseamos poseer con un deseo incontenible. Siento que me va a salir una fábula en cualquier momento, una que hable de un caballero y su señora y de algo que la muerte les hace que no los deja dormir tranquilos un día en el bosque, pero no. Entonces me saldrá un poema sobre la tristeza de estos días en los que no hay nada qué decir y a todos se les ha metido la idea de matarse, unos a otros y a sí mismos, porque estamos aburridos y hartos de todo.

Pero sonríes y me traes una lasaña más riquísima, que me devuelve la vida, me la como frente a los dioses y hablo con ellos que me dicen: hey chico, mira quédate un tiempo más y luego ya vemos a dónde te mandamos, ¿está bien? Y yo como siempre, sin respuesta sigo comiendo. Luego una manzana, un pucho.
Dios duerme en las piedras
Sueña en las plantas
Se agita en los animales
Y despierta en mí.

Cuando caiga el meteorito no habrá nada que comer, no puedo creer que Afrodita haya nacido de un pajazo de Zeus y todos los chiquillos salen los sábados detrás de ella, pero solo logran la alcoholización de rutina y una depresión horrible a la mañana siguiente. Y los Oniros, los hijos más querido de la noche, los que a todos dan su abrazo, son siempre rechazado por aquellos que se arruinan sin compasión y no duermen nunca, como yo, para caer sobre ellos muertos, como rojos campos verdes: inútiles bolsas llenas de aconte/theori-cimientos, acero y concreto hecho pedazos.

-Esta carrera, ¿cuándo se acaba? –digo casi ciego, casi completamente idiota, seguramente aburrido.
-Cuando tú quieras mi amor, cuando tú quieras. Échate, duerme conmigo –pavor, espanto en mi rostro como el de ciertos animales que saben que luego de la caída nunca más se volverán a levantar y terminarán despedazados en las fauces de sus predadores naturales antes del anochecer o convertidos en una masa de feroces gusanos del olvido.

Tal vez en mi próxima vida duerma diez mil años encerrado en una piedra. Tal vez diez mil millones de años a los pies de mi Señor. ¡Oh Señor, dónde estás? ¡Oh Señor, dónde debería estar yoh y qué debería estar haciendo hoy? ¡En medio de qué batalla me has colocado que no entiendo nada y solo siento que todo se acaba hora tras hora? Gracias por todas estas magníficas sorpresas en mis ojos de arco iris sonámbulo. Ayúdame a destruir para siempre el siglo XX, oh Sagrado y Misericordioso Señor. Deja que ambos ejércitos se destruyan y envíame tan lejos que vuelva a abrir los ojos frente a ti y esta vez realmente sienta que no estamos solos rodeados por las risas de los ángeles y tengamos que volver a atravesar el silencioso desierto en busca de la altura solo paras poder caer de rodillas ante ti y humillarme con el más servil y pequeño de toda tu larga corte amantes. Córtame las piernas oh Señor, arráncame los huesos y lleva de tu mano mi alma hacia tus esferas y luego de hacerme arder en llamas y usarme para dar señales de humo a los planetas que no me es dado ni siquiera imaginar, ¡qué felicidad todo esto! por favor, luego de eso hazme llover para volver al mar y reconocerte bajo las olas y los surfers y las piedras y los lobos del mar y las avionetas que arrastran banderines largos con frases y logotipos de cosas para vender.

Y las cosas minimalistas y las creaciones masivas, como las cosas de Warhola y de todos los idiotas que lo admiran, como yo.

Un oso polar deriva sobre un hielo que cada vez se hace más pequeño, como yo, en medio del océano y nosotros seguimos preocupados por wevadas recontra nada que ver, como yo. Y aburridos porque somos unos horribles aunque digamos lo contrario. Esto es así tío, no importa lo que digas la única verdad es la que demuestras con tus actos y yo no tengo ganas de hacer nada, fácil sentarme a sonreír como ya lo había hecho Buda. I’d prefer to lose touch with my mind rather than with nature. Estoy harto. Estoy cansado. Estoy aburrido y me siento como el patito feo cuando todavía era feo. Tengo hambre y ganas de bailar y sembrar nucleares en las cabezas más tranquis para que exploten como piñatas de barro con forma de burritos o toritos de Pucará, pero sobre todo no tengo ganas de nada, solo de ver que suceda algo grosso en el youtube una mañana como la del 11 de setiembre de 2001, de lo cual seguro tampoco tendré nada importante qué decir, como lo de Bagua y eso. Arráncame los ojos y déjame abrazarte. Te perdono y espero me perdones, porque, yo qué sé, de pronto un día comencé a existir, ¿me entiendes? Supongo que fue así. No tengo la culpa, algo me creó. Obedezco a una voluntad desconocida, te amo Kami. Mis metas son seguir riéndome de todo esto y seguir contigo.

Y bueno, si puedo seguir escuchando kicking giant y plug-plug, entonces está bien.

Aquel glorioso 11 que me manchó. Supuestamente debió tomarle tres días, no los más de dos mil años que se dio para vagabundear en el submundo, en los sótanos de todos nuestros corazones, en algunos de los cuales ya eclosionó y ha comenzado a piar como un fénix bebé, like a baby cobra mordiéndose la cola, como tú, ¿te has dado cuenta? Todo lo que queda por hacer, ya ha sido hecho y te dejaron con tu frase favorita en la punta de la lengua, ¿no es fantástico? Ahora ya tienes toda la eternidad para decirla una y otra vez y los infinitos rostros para que te la escuchen y se la metan en el culo.

-¿Y mi cuerpo?
-¿Acaso no lo ves, no te has dado cuenta que está en todas partes?

No me preguntes exactamente cómo, pero observa las figuras geométricas que forma tu voluntad. El ser es solo voluntad, en otras palabras: "ganas de".

¿Ganas de qué tenemos hoy, miguel?
Cualquier cosa no-pop. Algo del tipo “con un poco del esfuerzo de todos juntos haremos rodar la piedra alada”. ¡Cuán inútil es todo esfuerzo que nace de la emoción! Y qué bello es lo realmente inútil.

Videos con colores de colores:


Este me hace acordar a 7am, pero también a Gaby Mu que me habló un día de la pela esa que hasta ahora no he visto, el globo rojo.


Hoy estuve escuchando un disco de Helio Sequence y busqué un video...


No tengo idea de cómo llegué a este.


Este creo que me lo pasó Sybila.