No sé en qué momento mi voz deja de ser mi voz, para ser la voz del teléfono, en qué momento dejé de moverme con las piernas y utilicé una bici, en qué momento los hombres dejaron de andar por ahí y se envolvieron en autos y aviones. En qué momento mis manos se convirtieron en taladro, martillo, serrucho. En qué momento mi memoria se convirtió en cassette, diskette, cd, aparatito de conexión USB para el que ni siquiera tengo una palabra que me haga sentir normal al escribirla; mi imaginación se convirtió en tele, radio, cine, ipod; mi retina en telescopio. Los ejemplos son infinitos Habito la tecnología que he creado. Es verdad que todos somos cyborgs. ¿Qué queda de mí, acá abajo?
La hemo-oxigenasa degrada el grupo hemo en los macrófagos, abriendo el anillo tetrapirrólico en una molécula lineal, y dando como resultado hierro libre, y una cadena de 4 anillos pirrólicos, la que será el sustrato de formación de la bilirrubina.
Somos inmortales, aunque no nos entiendan o no quieran hacerlo.
Somos inmortales, porque este cuerpo es solo cenizas y uno está en todos lados.
Somos inmortales, porque somos uno como letra, como menos que eso incluso, aquí y allá, como burbuja en la espuma del mar o como grano de arena o como nube o célula o persona caminando en medio de la ciudad o en un auto yendo a comer helado o en un avión de vacaciones o en cualquier sitio. Inmortales como el reflejo de un espejo indestructible, inmortales como el polvo, como la escoba y como el suelo. Inmortales como cada una de sus letras desde la i hasta la s, inmortales como los cuerpos de las ballenas cazadas en Japón, inmortales como cientos de delfines que se suicidan de la noche a la mañana y nadie sabe por qué. Inmortales como el otoño y el invierno y la madera que crece y se pudre y mañana se va al fuego o como una nada amante discordiana que hoy está aquí y mañana allá. ¿Y quién va a recuperar el control total de su propia mente? ¿Quién va a hacerse uno con su subconciente para poder sumergirse en las oscuras aguas del inconciente con una vela encendida que la nada jamás logrará apagar?
Las percepciones son la superficie del lago del mundo. Puedes ver en ella el agua o el reflejo del cielo de la mente. Hay un libro que se llama El secreto, lo he chekado y dice lo mismo. Lo están pirateando así que un montón de gente lo leerá. Y un montón de gente comenzará a vivir dentro de su propio cerebro. No tengo idea de qué va a suceder, pero los cuerpos caídos en combate se están levantando para explorar el nuevo mundo.
4 comentarios:
El hombre es eterno mientras dura.
Dudo que ese libro les cambie algo, habitaran una mente sobre su mente. No hay libro para ser libre..
Está piola el texto, causa.
Me ha intrigado de sobramanera el asunto de los delfines, voy a indagar...
lo de los delfines me pareció un verso.
Eres inmortal mientras vivas, vaya, eso se lo dije el otro día a una chica, y a ella también le pareció que tenía sentido.
Bruto, también he pensado que lo auténticamente imaginario es la separación entre imaginación y realidad.
Creo que el viaje comienza con las preguntas: en que momento mi mundo se convierte en el mundo? En que momento me da igual lo que vaya a aparecer o suceder? En que momento no le temo a nada y me da igual el siguiente paradero del viaje infinito?
Aunque todo instante, toda pregunta es de todas formas una buena pista de depsegue.
Creo que la cosa es tampoco guardar ninguna ilusion, ninguna esperanza para poder conocer el ahora en todo su silencioso esplendor. Todo lo demas es cuestion de entrenamiento. Esto es tambien puro floro, que mas da. Es verdad que todos son budas se hayan dado cuenta de eso o no. Los primeros se rien, los segundos hacen cualquier otra cosa que tambien esta bien.
Me alegra saber que a alguien le gusta lo que sale escrito en este blog. Y no se, no solo me refiero al libro, estoy observando como la sociedad cambia a terremotazos, a librazos, a encontronazos o a TLCazos.
Ahora estoy leyendo Generacion chochebomba que me lo jugo un pata. Valdria la pena leer el informe final de la comision de la verdad y ver quienes mas tienen que morir para que se conozca la felicidad interminable en todos los estratos sociales.
Paz y amor, discordianos, disculpen la ausencia de tildes.
Poota, webón, ME ENCANTÓ este post, cholito.
Y... esta vela NO SE APAGA NUNCA.
And say no more!
Abrazos felicitadores.
Publicar un comentario