cuando me muera tendré bastante tiempo para reposar
si ya tengo hecho mierda el corazón
no me queda más que destrozar las pequeñas partículas
que queden flotando en el aire
ojalá tuviese algo de autoestima y autocontrol
Últimos trucos de magia saliendo
debajo de la manga
como manotazos de ahogado
como sueños a colores descontrolados
de amaneceres mojados de sudor
sobre el pasto
y crayola derretida.
Hagan las cábalas,
que no todos los días
se asesina a 372.
o la destrucción de las formas inquebrantables. Sobre cómo tres muchachos decidieron poner un puesto de pop corn en la avenida y de cómo las monjas chinas les preguntaron dónde quedaba el jardín oscuro de Schöenberg, ellos al ver que las uniformadas en el hábito de nuestro Señor Jeremías Equisto no llevaban peniques ni chibilines, las mandaron al desvío sin percatarse que el camino que les señalaron con desidia las llevaría a través del tortuoso sendero de una felicidad infinita.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario