sábado, 29 de marzo de 2008

Esta ha sido definitivamente la década de This is that.

Ya te has puesto a pensar lo que va a pasar cuando todos se den cuenta
que somos la misma persona vagabundeando en un espacio-tiempo
que da vueltas y se cruza y se mezcla y se hace el amor de mil formas distintas.

Sabes bien que lo que tengo en el fondo del cerebro,
lo pusiste tú, sin que me diera cuenta. Lo escondiste en la tele.
En todas las canciones que se hicieron el siglo pasado.
Lo guardaste en una vasta tradición literaria, que como una hormiga recorro diariamente.
Lo escondiste en los códigos genéticos de las bestias que vi a mi alrededor y de las que aprendí.
Y ahora que te veo a los ojos ya no quiero escupirte. Sabes bien que eso que tengo en el fondo del cerebro,
lo pusiste ahí porque querías verme dándotelo, tal como me lo diste a mí.

Eso es lo que soy, solo un hombre con una guitarra.
Nunca aprendí a tocar, pero igual toco.
Tal vez no con todas las cuerdas.
Tal vez nadie me escuche, pero en algún lado,
sé muy bien que hay un espejo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tú ya eres el monarca de tu propia piel; tu inviolable libertad sólo espera completarse en el amor de otros monarcas: una política del sueño, urgente como el azul del cielo.