Invasión

Se para en la combi y les dice:
no soy cristiano, pero crístico,
les voy a recitar unos poemas
que he escrito para darles ánimo
en este día:

Los santos están aquí,
aquí sentados o
afuera caminando
Tal vez sepan que están haciendo
lo que quieren.
Y se den cuenta que son santos.

No adora cristos en cruces,
pero ama al mundo y a
todas las cosas del mundo.

Es un revolucionario,
su arma
es una sonrisa tranquila
y la esperanza,
la sensación de que mientras uno sueña
las cosas se están solucionando,
(que de una u otra forma la salvación
está ahí, con los ojos cerrados).

Él es cada uno de nosotros,
cuando nos atrevemos a cambiar y a ser libres,
a mirarnos en el mundo como en un espejo,
que nos da lo que le damos,
que siempre devuelve nuestro gesto.

El mundo necesita de ti,
pequeño Cristo improvisado.

En esta época suena en las combis
Atrévete te te
salte del clóset.

Vamos santo, no seas tan oscuro.

Por cada hombre que entra al cielo
hay una pieza en el sistema
que
desaparece.

Haz lo que quieras.
Lo que quieras está bien.
Solo haz tu mejor esfuerzo.
Te amo.

Porque eres libre.
Por ti existe el tiempo y la muerte,
pero también la vida y la eternidad.